lunes, 16 de noviembre de 2009

Luz fria.


Disculpe señora luz,
si usted!
quisiera decirle algo,
mirá, tu, la gran luz, la dueña del dia
y de esas chocherías relacionadas con lo bueno,
lo mágico, lo omnipotente.
Quise por mucho tiempo
encontrar lo bueno,
utilizando tu brillo
tu fosforescencia;
queria ver si ahi hallaba la solemnidad,
de lo inocente la efervescencia,
de una sonrisa lo que buscaba.
No se si te han dicho..
pero eres tan falsa y engañosa como la neblina!

no sabia que esperar con tus palabrerias.
Sinceramente, crei que algo noble.
Con tus ojos engañosos, y caricias iluminadas
debo decirte ahora..
MALDITA! de verdad eso no era eso por lo que suspiraba.
Que acaso no veias mis lagrimas secarse debajo de una piel reseca?
Como se me filtraba la esperanza por las uñas..
Ahora, debo decirte;
encontré tu luz perdida en un beso hecho de siluetas
en un bazar negro, donde los recuerdos juegan.
En un lugar, lejos de ti,
encontré la felicidad,
señora luminescencia.

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